La felicidad...

Que bonita palabra la felicidad, que fácil es ser felices y que difícil lo ponemos a veces.. Las cosas más sencillas son las que verdaderamente nos tendrían que hacer felices o conscientes de estar presentes, estar presente es vivir el momento agradeciendo todo los que tenemos, aunque a veces, lo que tengamos sea muy poquito.

A mi me hace feliz caminar, pasear.. meditar mientras camino, mirar al cielo y ver ese maravilloso azul que se deja abrazar por el Sol. Me hace feliz permanecer en silencio y escuchar dentro de mi, es mi consuelo muchas veces en mi desconsuelo... caminar por el campo, oler el frescor de la humedad de la lluvia reciente.

Me gusta escuchar y aprender de las personas, cualquier sitio es bueno para ello. Siempre hay personas interesantes con las que nos cruzamos o nos encontramos en el camino, incluso en el trayecto que nos lleva al trabajo.


La música me hace feliz, dejarme llevar por sonidos de tambores y que mi cuerpo dance, se ponga en trance.. sentirme poseída por los sonidos de los elementos, el viento, la lluvia.. los pajaros...



Me hacen feliz muchas cosas, son las que mantienen vivo este espíritu mio... los amigos que me quieren de verdad, los que me lo han demostrado con creces, en mis peores momentos ahí han estado.. los que no lo han sido han desaparecido, y eso es lo mejor que puede pasar, que quien no te quiera bien lo dejes marchar.


La felicidad está en nuestro interior, si ese interior está vacío y lo alimentamos de auto engaño, de cosas que solo nos llenan superficialmente, de esas cosas que creemos que nos dan la felicidad, pero que cuando llegamos a casa, en nuestro silencio, en nuestro vacío.. en nuestro engaño escogido.. frente a un ordenador, donde muchas veces hay una gran mascara, pero que cuando uno se mira al espejo y se pregunta: - esta es mi vida?.. no, esto no es vida... es una felicidad escondida.



He decidido retomar costumbres que ya tenia, que había dejado olvidadas, posiblemente deje muchas cosas.. personas.. y todo lo que ya no me aporta nada, lo que no me produce sentimiento de felicidad, lo que era y no es... posiblemente...

Algún dia en cualquier parte, en cualquier lugar indefctiblemente,

te encontrarás a ti mismo, y ésa, solo ésa,

puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas.

Pablo Neruda